04/07/2024

Modelo hortícola de invernadero: compostaje, sostenibilidad y gestión eficiente

modelo hortícola de invernadero

El modelo hortícola de invernadero ayuda a producir alimentos de manera sostenible. Destaca por su innovación, sencillez y optimizado uso de los recursos. Eso sí, para aplicarlo como es debido, debes tener en cuenta algunos aspectos. Los desarrollamos en este contenido.

Principios del modelo hortícola de invernadero

Existen varios fundamentos esenciales a los que debes atender para implementar el modelo de manera correcta. Su finalidad no es otra que facilitarte una guía para que des cada paso con firmeza. Estos son los que debes seguir:

  • Control del clima. Es un factor esencial para maximizar la producción. Precisas establecer la temperatura, la humedad y la luz óptimas en función del cultivo. Así, creas un ambiente idóneo para su crecimiento sin importar las condiciones externas.
  • Uso eficiente del agua. Esto es posible gracias a sistemas de riego por goteo o mediante la recolección de lluvia. Son métodos que limitan el desperdicio, tanto por evaporación como por escorrentía, y que aumentan la precisión.
  • Fertilización precisa. Empleando tecnologías avanzadas, los nutrientes se suministran directamente a las raíces. Esto no solo mejora la absorción del alimento, sino que rebaja el riesgo de contaminación del suelo y del agua.
  • Compostaje integrado. Al hacerlo dentro del invernadero, creas un ciclo cerrado de nutrientes. Los desechos vegetales se convierten en abono que enriquece el suelo, lo que mejora la salud de las plantas y minimiza la necesidad de recurrir a químicos.
  • Gestión de plagas y enfermedades. Los invernaderos permiten la implementación de mejores estrategias para disminuir ambos riesgos. Puedes usar desde controles biológicos a trampas o barreras físicas. Sin esfuerzo, dejas de depender de pesticidas químicos.
  • Eficiencia energética. El uso de tecnologías como la iluminación LED y sistemas de calefacción eficientes hace descender el consumo de electricidad. Además, algunos invernaderos incorporan fuentes de energía renovable, como paneles solares, para disminuir aún más su huella de carbono.

Compostaje en invernaderos

Es una práctica esencial que puedes llevar a cabo de múltiples maneras y que resulta beneficiosa. Eso sí, antes de levantar tu invernadero, conviene que despejes tus dudas acerca del compostaje.

Métodos de compostaje en invernaderos

Entre los métodos existentes, los que siguen son los más interesantes:

  • En pilas. Se trata de acumular residuos orgánicos en montones que deberás voltear cada cierto tiempo para oxigenarlos. Además, puedes cubrirlos para controlar la humedad y la temperatura. Es muy fácil de poner en práctica.
  • En contenedores. Supone una evolución del anterior. En lugar de colocar los restos en el suelo, los dispones en un recipiente. Este se cierra o deja medio abierto para airear el compost y favorecer el drenaje. Es un método idóneo si no dispones de mucho espacio.
  • Vermicompostaje. Las lombrices son las encargadas de descomponer los desechos. Estas se colocan en contenedores y se van alimentando para producir un compost con un alto contenido en nutrientes.
  • Uso de túneles. En este caso, los materiales permanecen en unas estructuras largas y estrechas. Pueden equiparse con sistemas de aireación forzada y control de temperatura.
  • Compostaje comunitario. Es uno de los más complejos al llevarse a cabo con maquinaria industrial. Sin embargo, mejora el proceso al hacerlo más eficiente y a menor coste. Si te interesa, uno de los fabricantes mejor valorados es Ecopans. Sus máquinas se amoldarán a tus necesidades por completo.

Beneficios del compostaje para la producción hortícola

Con el compostaje, obtienes varios beneficios. Uno de los más importantes es que aumentas la sostenibilidad del invernadero. Recuerda que aprovechas los residuos que produces con tu actividad, lo que disminuye los desperdicios.

Al mismo tiempo, mejoras la calidad de los cultivos, que ganan en salud y resistencia, sin obviar que deja de ser imperativo utilizar productos químicos, en especial fertilizantes, para que las plantas se desarrollen de manera adecuada.

Sostenibilidad en la horticultura de invernadero

La mejora en la sostenibilidad que logras en la horticultura de invernadero va más allá de la gestión de residuos. Gracias a la implementación de prácticas y tecnologías innovadoras, tu impacto ambiental será mucho menor.

Prácticas sostenibles en invernaderos

Procura usar sistemas de riego por goteo y de reciclaje del agua para no malgastarla. Asimismo, existen soluciones para elevar la eficiencia energética como, por ejemplo, las luminarias LED. Consumen poca electricidad, pero proveen de una buena iluminación durante años.

No olvides reciclar materiales como plásticos y envases. Tarde o temprano acabarás utilizando algún producto que venga embalado. Por tanto, más vale contar con una manera de gestionarlo de forma adecuada. Por descontado, repara en si te compensa recurrir a sistemas de hidroponía o cultivo vertical para optimizar el uso de la tierra.

Reducción del impacto ambiental

Con las prácticas anteriores, conseguirás que tu impacto ambiental sea escaso. Buena parte de la horticultura de invernadero moderna tiene esta finalidad. Además, dispones de infinidad de tecnologías, a muy bajo coste, que son sencillas de implementar. Sin ir más lejos, el compostaje es un buen ejemplo.

Gestión eficiente en invernaderos hortícolas

Acometer una gestión eficiente reclama un cierto esfuerzo. Para empezar, necesitas planificar los cultivos para que se desarrollen sin problemas. Esto contribuirá a que optimices su producción sin caer en unos abultados costes. No olvides incluir qué tecnologías te interesa aplicar.

Desde los sistemas automatizados a la hidroponía, cuentas con una amplia variedad. Escoger uno u otro dependerá de los objetivos que estés persiguiendo y de tu presupuesto. Debes plantearte cómo optimizar el uso de tus recursos.

Optimización del uso de recursos

Una de las claves consiste en monitorizar los consumos. La electricidad o el agua pueden controlarse mediante sensores conectados a una centralita. Esta te posibilita establecer los parámetros requeridos para favorecer el crecimiento de los cultivos. Así, los desperdicios que puedas generar caerán considerablemente.

Incluso, es posible optimizar el espacio dentro del invernadero. Aunque el tuyo sea de pequeño tamaño, la opción de aprovechar la vertical siempre está disponible. Quizás pienses que es un reto, pero te aportará nuevas perspectivas y oportunidades.

Piensa que cualquier mejora que implementes redundará en un mejor aprovechamiento de los recursos. Pondrás tu granito de arena para ayudar a combatir el cambio climático.

En Internaco Medioambiente siempre apostamos por el reciclaje y las prácticas responsables con el medio ambiente que ayudan a cuidar nuestro planeta. Si tienes una empresa y quieres sumarte a este tipo de acciones, no dudes en realizar un estudio de gestión de residuos para conocer el plan que mejor se adapta a tus necesidades. Entre todos podemos trabajar para conseguir un futuro más sostenible.